Hoy soñé con uno de esos tanto encuentros "casuales" que antes eran posibles. Con tus ojos rojos y cansados que al no reconocerme corrían la vista.
Hoy soñé que rogaba tu atención, como mil veces lo he hecho. Con tu mano rozando la mía y llevándome al silencio, allí donde solos y a oscuras siempre nos entendimos mejor, donde todo dolía un poco mas.
Hoy soñé con esa oportunidad que vengo esperando hace tiempo, y que ni siquiera con los ojos cerrados pude aprovechar. Cada palabra que salia por mi boca te importaba, lastima que tu presencia siempre me dejo muda.
Hoy soñé con esa sonrisa cerca de la mía, y pude volver a sentir ese beso. Una noche poco parecida a las que tuvimos, las lagrimas fueron intercambiadas por miradas, las peleas por caricias.
Hoy soñé con una mas de nuestras tardes bizarras, con tu cuerpo junto al mio, y nada a nuestro alrededor.
Hoy sentí recuerdos, viví dormida, queriendo permanecer con los ojos cerrados, soñando y escapar, tu mano y la mía, lejos, nadie mas.
Hoy tuve un largo sueño del que me costo largo tiempo poder despertar.

Un gran estruendo en uno de sus sueños hizo que se levantara con miedo, recostada sobre donde no recordaba haberse tumbado la noche anterior, trata de encontrar alguna pista para entender, y allí esta, esa foto como siempre, reposando en ese estante, expectante  Si esa chica soy yo, se respondió  quien es el que la acompañaba, cual era ese sentimiento, una leve sospecha le susurro, felicidad, y como un rayo se fugó.

Al lado de él todo se veía diferente, cada paso era mas sueve, cada avance deslizaba, resbalaba. Latido al ritmo de reloj, miradas escurridizas entre las brisas. El sonido de la locura, flotando por arriba nuestro. Nosotros íbamos marcado el sendero. Cierra tus ojos, siente como las los pantallazos se chocan con tus parpados, siente el viento corriendo sigilosamente por entre tu pelo, y siente, como el tiempo pasa y tu no lo sientes. Notas susurrando una danza, que nos envuelve y nos da vueltas. Trata de sentir lo que estoy pensando, de escuchar lo que no estoy gritando.
Cierra los ojos y esta ahi de nuevo, enfocando desde arriba, sus brazos pierden fuerza, se tumba sobre el suelo, mira hacia arriba, los cierra de nuevo.

El viento no se animaba a soplar, los pájaros habían callado su canto, una mariposa se animo a pasar sigilosamente y la neblina hizo que rápidamente se diese vuelta. 
El silencio inundo la escena, la tierra paro por un par de minutos, las nubes taparon el sol, y todo permaneció así, como nosotros y nuestras lagrimas que no se desidian a correr.
Todos los recuerdos comenzaron a proyectarse delante de nuestros ojos, como si fuera una mas de nuestras noches de cine. 
Sus manos permanecían juntas, inmóviles, ninguno de los dos quería soltarse, tampoco aferrarse. 
Su mente le jugaba una carrera, mientras su cuerpo no podía reaccionar.
Transportados a ese cuarto, buscando ese beso perdido en el tiempo.
Ya no había preguntas, porque las respuestas ya se habían desvanecido. Ya no habia miradas, no podían abrir sus ojos. 
Solos, ellos y su amor apagándose, quietos, y el tiempo yéndose. 
Lo siento dijo susurrándole, te amo le dijo él.